Que las vacunas cambian el sexo de la persona, son pequeños venenos que introducen, que generan cáncer, con ellas nos ponen un chip para robar la información, que nos controlan a través de ellas y se colocó un biológico y murió, son algunas razones por las que hoy hay ciudadanos que no se inmunizan o no lo hacen con los suyos.

Ideas de este tipo, radicalizadas en los movimientos antivacunas, pueden causar daños al ser humano, como afectaciones en órganos, tejidos o células; así lo asegura incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS).

"Estas creencias son falsas. En medicina, las asociaciones deben demostrarse con estudios amplios. Que una persona tenga un evento posterior a la vacunación no significa que la vacuna lo haya causado", detalló el médico Jorge Iván Marín, especialista en infectología y microbiología.

Según el profesional, las vacunas no se escapan de producir riesgos como los pueden ocasionar otros fármacos, pero dijo que -en la mayoría de los casos- son mínimos y el beneficio supera ampliamente esos riesgos.

 

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"Los movimientos antivacunas cambian este concepto y sostienen que los riesgos son mayores que los beneficios. De esa forma incentivan la no vacunación, generando miedo y terror basados en los posibles efectos secundarios y en una exageración de los riesgos", resaltó Marín.

Esto es grave, mencionó el experto, porque los niños -por ejemplo- "no desarrollan anticuerpos, quedan desprotegidos, se exponen a infecciones, a la posibilidad de morir o de tener secuelas de por vida".

Una ciudadana colombiana, hoy radicada en Estados Unidos, se ha declarado antivacunas. Su hija de 3 años no tiene biológico alguno y ella tampoco tiene intención de iniciarle algún esquema por varios motivos.

"Acá hay miles de casos de muertes de personas cercanas, después de colocarse la de la covid-19. Y de las demás, las de los niños, por autismo, por asma y por varias alergias alimentarias", apuntó la mujer.

 

Aseguran que son fundamentales en los menores de edad

Marín dijo que, en la historia de la humanidad, las dos cosas que más han disminuido la muerte por enfermedades infecciosas son los antibióticos y las vacunas.

"Está claramente demostrado que las vacunas tienen grandes beneficios y que son una de las principales formas de prevenir muertes por infecciones. Los estudios, trabajos y la evidencia muestran que son mucho más efectivas que dañinas", recalcó el chinchinense.

Él advirtió que son sumamente importantes para los menores de edad, en sus diferentes edades: algunas vacunas se aplican desde el nacimiento, otras cuando son lactantes menores, otras cuando son escolares y otras en la adolescencia.

"Es importante vacunar en esas etapas, porque son los periodos en los cuales los niños empiezan a generar defensas, los anticuerpos, que son los que les darán protección durante toda la vida. Algunas vacunas protegen de por vida; otras requieren refuerzos".

 

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El médico lamentó que la desinformación tenga una gran influencia y que muchas personas se dejen llevar por opiniones que no tienen un argumento científico sólido, por comentarios callejeros o de redes sociales.

"Como solemos enfocarnos en lo negativo, se crea una corriente de miedo y terror basada en información incorrecta. Persisten muchos mitos que se han transmitido a lo largo del tiempo. Es necesario revisar siempre lo que dice la literatura científica y basarse en los profesionales entrenados", agregó.

Hoy los movimientos antivacunas afectan lo que se conoce como la inmunidad colectiva o de rebaño. El profesional subrayó que si la sociedad no se vacuna, no se logra este concepto de bienestar.

"Esta inmunidad se alcanza cuando más del 80% de la población está vacunada contra una enfermedad específica. Si no se alcanza ese nivel, se pierden los anticuerpos y defensas colectivas, lo que puede causar la reaparición de infecciones ya controladas o nuevas enfermedades causadas por gérmenes más agresivos o resistentes", especificó.

 

Para evitar un retroceso en salud pública

Marín aprovechó para hablar de las enfermedades que han reaparecido o se han fortalecido por la falta de vacunación: la influenza, la tosferina, ciertas neumonías y la meningitis, algunas de ellas.

"De estas hay biológicos gratuitos en el Plan Ampliado de Inmunizaciones (PAI). Son muy seguras y tienen efectos adversos menores al 1%, mucho menos riesgo que un acetaminofén, por ejemplo. Sin embargo, la falta de vacunación expone a los niños a infecciones graves y sus posibles secuelas".

Para el médico, un futuro sin vacunas sería catastrófico, sería retroceder cientos de años, volver a la antigüedad, cuando más del 70% de las personas que padecían una infección, morían.

"En ese entonces no existían antibióticos ni vacunas, sería retroceder muchos años en la historia y volver a ver muertes por enfermedades que hoy pueden prevenirse", concluyó Marín.

 

Con la Secretaría de Salud Pública de Manizales

Jennifer Paola Bonilla, profesional universitaria coordinadora del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) de la Secretaría de Salud Pública de Manizales, aseguró -frente a la vacunación- que este plan se caracteriza por ser sin barreras y totalmente gratuito, gracias al Ministerio de Salud y Protección Social.

"Es uno de los programas más completos en vacunas para la población en toda la región de las Américas", subrayó Bonilla; mientras explicaba que está centrado en niños y adolescentes; aunque también contempla unos fármacos para gestantes y adultos mayores.

Ella añadió: "En el país se cuenta con vacunas para más de 30 patologías, que pueden ser prevenibles mediante la vacunación. En el municipio hay alrededor de 17 IPS donde cualquier persona puede vacunarse".

 

Foto | Archivo | LA PATRIA

La Secretaría de Salud Pública de Manizales adelantó, este 2025, una campaña de inmunización contra la fiebre amarilla. Hubo alerta epidemiológica con esta condición.

 

La experta dijo que no debe darse ninguna restricción para acceder a la inmunización, sin importar la afiliación a una EPS o el lugar de residencia. Ella explicó que una persona puede acudir a cualquier IPS para ser atendido, sea del municipio o del país, si es susceptible de recibirla.

"La vacunación es un programa de salud pública que permite lograr la inmunidad de rebaño. A medida que se vacuna una gran parte de la población, se frena la llegada y transmisión de virus en comunidades y ciudades", agregó.

Bonilla mencionó que es fundamental generar confianza en los padres sobre la antigüedad, efectividad y seguridad de los biológicos incluidos en el esquema nacional. Contó que antes muchas vacunas se pagaban, pero hoy la gran mayoría son gratuitas.

"Hace 15 días, por ejemplo, el Ministerio incluyó una vacuna exavalente para bebés prematuros extremos, que antes debía comprarse y ahora es gratuita. Estos son beneficios que fortalecen el programa de vacunación".

Sobre los que hoy todavía se niegan a acceder, por ejemplo, a la vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH), recordó un suceso en Colombia con más de 20 años de historia y que conmocionó el Norte del país.

"Aún hay padres que recuerdan lo ocurrido hace unos 20 años con unas niñas que presentaron desmayos, situación que nunca se comprobó que tuviera relación con ese biológico. Sin embargo, en los países desarrollados, la vacuna del VPH ha demostrado evitar muertes por cáncer de cuello uterino y otros cánceres genitales", detalló.

 

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Bonilla explicó cuál es el proceder cuando los padres y/o cuidadores no quieren vacunar a los menores de edad, no antes sin detallar cómo instan a la inmunización con las entidades educativas, tanto del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), como colegios de primaria y bachillerato, tanto públicos como privados.

"Se cruzan datos con la población matriculada para verificar qué biológicos faltan. Actualmente no existe una norma que obligue a presentar el carnet de vacunación para matricular a un niño. El ICBF sí exige tenerlo actualizado, pero los colegios no".

La profesional explicó que durante el año escolar se hacen jornadas de vacunación en las instituciones. Dijo que en algunos casos los padres prefieren vacunar en las IPS y que otros manifiestan abiertamente su negativa a vacunar.

"Cuando esto ocurre, se intenta intervenir desde trabajo social, psicología o pediatría para brindar información y orientación. Si los padres persisten en no vacunar, el caso puede ser reportado al ICBF como posible negligencia o vulneración del derecho a la salud del niño. Esta institución evalúa cada caso y verifica si hay maltrato u otras situaciones de riesgo", mencionó.

Bonilla dijo que han existido casos donde los padres insisten en no vacunar “aunque los reporten donde los reporten”. Subrayó que en esos casos se respeta la decisión, pero se recomienda mantener controles de salud para garantizar otras atenciones.

 

Las vacunas del esquema avalado

Este es el esquema nacional avalado por el Plan Ampliado de Inmunizaciones (PAI) del Ministerio de Salud y Protección Social. No pierda la oportunidad de procurárselo a aquel miembro de la familia que lo necesite:

 

Recién nacido (al nacer)

- BCG: previene la tuberculosis.

- Hepatitis B: primera dosis, previene la hepatitis tipo B.

 

A los 2 meses

- Pentavalente: (Difteria, tétanos, tosferina, Haemophilus influenzae tipo b y hepatitis B).

- Polio (IPV): primera dosis.

- Rotavirus: primera dosis.

- Neumococo conjugada: primera dosis.

 

A los 4 meses

- Pentavalente: segunda dosis.

- Polio (IPV): segunda dosis.

- Rotavirus: segunda dosis.

- Neumococo conjugada: segunda dosis.

 

A los 6 meses

- Pentavalente: tercera dosis.

- Polio (IPV): tercera dosis.

- Influenza estacional: primera dosis (solo para niños menores de 2 años).

 

A los 7 meses

- Influenza estacional: segunda dosis (refuerzo para completar esquema en menores).

 

A los 12 meses (1 año)

- Sarampión, rubéola y paperas (SRP): primera dosis.

- Varicela: primera dosis.

- Hepatitis A: dosis única.

- Neumococo conjugada: refuerzo.

 

A los 18 meses

- DPT (Difteria, tosferina, tétanos): primer refuerzo.

- Polio (OPV o IPV): refuerzo.

- Fiebre amarilla: dosis única.

 

A los 5 años

- DPT: segundo refuerzo.

- Polio (OPV): segundo refuerzo.

- Sarampión, rubéola y paperas (SRP): refuerzo.

- Varicela: refuerzo.

 

Entre los 9 y 17 años

- Virus del Papiloma Humano (VPH): dos dosis (niñas y niños).

 

Gestantes

- Influenza estacional: una dosis durante el embarazo.

- Tdap (Tétanos, difteria, tosferina acelular): una dosis a partir de la semana 26 de gestación.

- Covid-19: refuerzos, según lineamientos vigentes.

 

Mujeres en edad fértil (10 a 49 años)

- Toxoide tetánico y diftérico del adulto (Td): esquema de protección (3 dosis - Refuerzos cada 10 años).

 

Adultos mayores y grupos de riesgo

- Influenza estacional: dosis anual.

- Covid-19: refuerzos, según lineamientos vigentes.

 

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