Foto I Cortesía Servicio Geológico Colombiano I LA PATRIA
Profesores, con sus estudiantes, participaron el miércoles 24 de septiembre dele 2025 en un recorrido por las ruinas de Armero, durante la Octava Octava Bienal de Niños de Zonas de Riesgo Volcánico, organizada por el Servicio Geológico Colombiano. El 13 de noviembre de este año se cumplen 40 años de la destrucción del municipio tolimense.
El colegio San Bartolomé, en el corazón del departamento de Nariño, vive a la sombra del volcán Galeras. Esta montaña gigante es monitoreada, segundo a segundo, por el Servicio Geológico Colombiano (SGC). El colegio entrelaza esa realidad con la enseñanza en sus aulas.
El profesor de la institución educativa es Néstor Aurelio Muñoz quien compartió, como otros docentes de diversas regiones, su experiencia en la Octava Bienal de Niños de Zonas de Riesgo Volcánico, organizada por el SGC.
“Es una lección para el país y para las nuevas generaciones”, afirma Néstor, al resaltar la importancia de conmemorar 40 años de historia de lo sucedido con Armero (Tolima) y Chinchiná y Villamaría (Caldas) con el volcán Nevado del Ruiz. En ese hecho, ocurrido el 13 de noviembre de 1985, murieron cerca de 25 mil personas.
Desde hace 20 años, el plantel educativo ha incluido un área de gestión de riesgo en su currículo, convirtiéndose en pionera. “Somos la única del país que tenemos ya incorporado desde el grado preescolar hasta el grado 11, con una hora específica dedicada a este tema”, explica el profesor.

Fotos I Freddy Arango I LA PATRIA. En el colegio San Bartolomé, del municipio de Florida (Nariño) llevan 20 años enseñando gestión del riesgo, desde preescolar hasta 11. Ellos participaron en la Octava Bienal de Niños de Zonas de Riesgo Volcánico, organizada por el Servicio Geológico Colombiano).
Materias
Esta iniciativa ha permitido a los estudiantes adquirir un conocimiento profundo sobre los riesgos asociados al volcán Galeras y cómo enfrentarlos, manifiesta el educador.
Se debe recordar que la Ley 2427, del 9 de septiembre de 2024, obliga a los establecimientos educativos a contar con la gestión del riesgo y la sostenibilidad en sus programas educativos.
San Bartolomé, como lo comenta Néstor, tomó la delantera con cuatro componentes clave: formativo, organizativo, operativo y axiológico.
El maestro explica: El formativo enseña a los niños sobre los riesgos. El organizativo los capacita para conformar brigadas de emergencia. En el operativo, los estudiantes participan en simulacros permanentes, y en el axiológico, se inculcan valores esenciales como el autocuidado, la prevención y la solidaridad, siguiendo el marco de acción de Sendai.
Respeto
La Florida queda a 12 kilómetros del Galeras. La actividad volcánica allí se mantiene en estado de alerta Amarilla. Eso significa, como lo saben los alumnos y demás comunidad educativa, que es un volcán activo con cambios en el comportamiento del nivel base de los parámetros monitoreados y otras manifestaciones.

Foto I Freddy Arango I LAPATRIA. El docente Néstor Aurelio Muñoz.
“Por tal motivo, tenemos que tomar todas las medidas necesarias de prevención y conocimiento”, comenta el profe Néstor, quien reconoce la importancia de preparar a los jóvenes para enfrentar cualquier eventualidad.
En la Institución, cada día, aprenden sobre su entorno e irradian es conocimiento en sus familiares y vecinos. En cada clase, cada simulacro, cada lección, se construye un futuro más seguro y consciente, ice el maestro Néstor Aurelio Muñoz.
Y coincide con quienes participaron en la Bienal, llevada a cabo en Armero-Guayabal (Tolima) durante tres días: “El volcán es un amigo, no hay que tenerle miedo, pero sí respeto”.
Testimonios, lecciones y reflexiones de maestros en zonas de volcanes

Javier Perdomo Finscue, docente del colegio Gaitana Fxiw, en el territorio ancestral de Tálaga, municipio de Paez (Cauca)
Importancia de la Bienal
“Personalmente, con mi grupo de estudiantes, esta es mi cuarta participación Ha sido bastante interesante y lo seguirá siendo porque aquí siempre nos enseñan. Quedan aprendizajes que se requieren sobre cómo minimizar estos riesgos. Nosostros estamos en zona de riesgo por el nevado del Huila, porque están medio afluentes: el río Páez y el río Símbola”.
En clase de prevención
“Preparamos a la gente, a la juventud, a los estudiantes en cómo prevenir esa situación para que no ocurran tantas tragedias como lo fue en el 94. Entonces, últimamente hemos tenido ya buena respuesta y la gente ha respondido, sobre todo los jóvenes. Esa buena preapración es también gracias a la gestión de la Cruz Roja, de las instituciones de la Defensa Civil, de los Bomberos al igual que de las autoridades. La autoridad indígena juega un papel en las comunidades y sobre todo la Guardia Indígena, que es la que se encarga de estar pendiente. Además, se trabaja de la mano con los médicos tradicionales. Entonces, uno en cualquier momento va y les consulta y él le dice cómo está el asunto, si uno puede viajar por la ribera del río. Ees una cadena de trabajo que se realiza con ellos entre la Guardia Indígena, la autoridad indígena, los médicos tradicionales y las comunidades”.

Isabel Gutiérrez Cueni, dinamizadora comunitaria del componente de territorio y sociedad de la Institución Educativa Agroempresarial San Miguel de Avirama, municipio de Páez (Cauca)
Importancia de la Bienal
“Es la posibilidad de compartir con otros y otras personas que también comparten ese terruño con presencia de volcanes y es la forma de dialogar a partir de las artes, de la música, de la pintura, incluso de los sabores, de las tradiciones. Es una forma también de dialogar frente a lo que implica vivir en zonas volcánicas, gestionar la gestión, pero también trabajar desde la educación, porque es una oportunidad que tenemos en las bienales de hacer la transposición didáctica y que la gestión del riesgo se salga de las aulas para que también tome forma en los diferentes territorios”.
En clase de prevención
“Afortunadamente, gracias a la presencia del Servicio Geológico Colombiano, antes Ingeominas, se ha logrado hacer una articulación para alertas tempranas, para trabajar la prevención y la mitigación. Eso ha permitido que desde el enfoque diferencial y étnico nosotros permitamos minimizar esas afectaciones en la población, en la parte geográfica, en la parte social y pues lógicamente también salvaguardar las vidas de las personas. En el 94 tuvimos aproximadamente 1.100 víctimas y en el 2008, el 20 de noviembre, tuvimos unas 10 personas. Entonces, numéricamente, es una gran diferencia que ha permitido que nosotros aprendamos a convivir y a mitigar la gestión del riesgo”.

Didier Bermúdez, docente del colegio San Pedro, que se encuentra a 16 kilómetros de la única institución educativa rural que tiene el municipio en Armero (Tolima)
Importancia de la Bienal
“Es nuestra primera participación, la primera invitación para representar parte de la cultura armerita. Además, es un evento supremamente importante, hace 40 años que se vivió la tragedia y tenemos como institución educativa esa misión de mantener viva la memoria no solo de Armeros, sino también el reconocimiento de que no debe volver a pasar. Entonces, ese es un papel preponderante para nosotros, es actuar de verdad frente a las situaciones posibles que se puedan presentar como un verdadero actor, no mantener aislado que porque somos rurales”.
En clase de prevención
“Gestión del Riesgo para nosotros es un trabajo complementario porque la memoria es latente en el ADN prácticamente de la región, de todos los habitantes de la región. Todos tenemos algo que ver con el volcán, todos tenemos algo que ver con parte de lo que fue la mal llamadatragedia. Entonces, pues es mantener viva la memoria histórica, es mantener viva el relato de todos aquellos que sobrevivieron o que en algún momento conocieron el Armero que todo mundo añora y que todo mundo recuerda antes de 1985”.

Andrés Felipe Sánchez, docente del colegio Jiménez de Quesada, de Armero-Guayabal (Tolima).
Importancia de la Bienal
“Tiene un significado inmenso por el aprendizaje, el compartir todo el conocimiento de las demás delegaciones que vienen. Conocer sus culturas, conocer parte de ese espacio que ellos nos pueden ofrecer en cuanto a la parte de la prevención, todo lo relacionado con volcanes. Incluso hay datos que de pronto uno desconoce y es información valiosa conocer todo eso, ya que al final de cuentas, como docentes, tenemos que tenerlo en cuenta en el momento de llevarlo a nuestras aulas para compartirlo con nuestros estudiantes, para que en ellos se genere ese aprendizaje y ese cariño, antes que un temor hacia un volcán o una formación de esas”.
En clase de prevención
“La transversalidad es muy importante en el ambiente educativo, pues no es solamente limitarse a una clase magistral sobre X tema. La transversalidad permite, desde diferentes áreas, crear ese vínculo y la mejor apropiación del conocimiento, y más centrado hacia la parte de la gestión del riesgo. Muchos llevamos los proyectos a básicamente lo mismo: manejo de residuos, reciclaje, de pronto residuos sólidos, pero dejamos de un lado lo que es la prevención de riesgos, que de todas formas está relacionado con los fenómenos naturales. Todo esto es de vital importancia y lo más importante de todo es que cuando finaliza este evento, podemos llegar a nuestras instituciones y ser esa fuente de replicación de ese conocimiento para que los demás compañeros también se motiven a realizar esas actividades de transversalización”.

Yurani Muriel, Institución Educativa Técnica Tapias, sede La Cabaña, en zona rural de Ibagué (Tolima)
Importancia de la Bienal
“Es un lugar de visibilización muy importante. Nuestra sede es la única que se encuentra dentro de un cráter, que mide 2,4 kilómetros en el volcán Machín. La Bienal es un escenario de visibilización muy importante para nosotros, debido a que el contexto volcánico de nuestra sede es bastante particular. Entonces, tenemos unas situaciones de riesgo que llevamos un lapso de un año comunicándoles a las entidades responsables de la situación y que no se ha procedido. De momento nuestra vereda, que se llama Coello- San Juan carece de los elementos necesarios para la gestión del riesgo, como tener radios de comunicación que estén funcionales para estar dentro de la red de emergencias del volcán Cerro Machín. También estamos haciendo la solicitud para que se revise la actual ruta de evacuación. Tenemos una ruta de evacuación marcada hacia el corregimiento de Juntas por un camino completamente inhóspito, una caminata de alrededor de seis horas, y en el imaginario de las personas no está utilizar esa ruta de evacuación por precisamente la condición en que se encuentra. Estamos solicitándoles a las entidades responsables, Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, a la Secretaría de Ambiente y Gestión del Riesgo, que nos colabore con estas solicitudes, debido a que nosotros estamos en el cráter del volcán, somos el riesgo más inmediato, más inminente. Aprovecho el escenario para comentarles que el volcán Cerro Machín tiene un ciclo eruptivo de 800 años, el cual ya se ha cumplido. Esto intensifica mucho más la vulneración como tal de los derechos de los niños, de estar protegidos y como tal en riesgo su integridad física y su vida”.
En clase de prevención
“Es un reto muy bonito en el lugar, ya que trabajamos desde el emprendimiento al turismo rural comunitario y científico. En esta Bienal presentamos un proyecto transversal que se llama "Volcán Cerro Machín, Laboratorio Vivo para el Turismo Rural Comunitario y Científico", en el cual los niños aprenden del aviturismo, turismo, aprenden el reconocimiento de orquídeas, y la proyección de nuestro trabajo de investigación es de manera posterior hacer un recorrido por la historia de nuestro volcán. El volcán Cerro Machín era un lugar de peregrinación para la nación Pijao. Tenemos allí, en la vereda Coello-San Juan, un asentamiento indígena que eran los Metaima, y estamos tras la búsqueda también de ese pasado histórico. Este año de investigación nos permite hacer la entrega de un catálogo de aves y de orquídeas del volcán Cerro Machín, con el apoyo interinstitucional que hemos logrado conseguir con entidades muy importantes como el Servicio Geológico Colombiano, al cual le damos un agradecimiento muy especial por su trabajo tan arduo y riguroso. También hemos colaborado con entidades como Cortolima y estamos esperando que gestión de riesgo se vincule y nos ayude con estos procesos que estamos comentando. Hemos tenido la oportunidad de trabajar lombricultivo, utilizando los desechos orgánicos que quedan del Plan Alimentación Escolar (PAE), y con eso nutrimos nuestras lombrices. La proyección es generar humus y, de esta manera, hacer un abono orgánico para nuestra huerta escolar. El trabajo es completamente transversal porque allí trabajamos muchas áreas: ciencias sociales, ciencias naturales, y también el componente de ética y valores. Trabajamos en inglés, porque procuramos que los niños tengan el fortalecimiento desde el componente del emprendimiento en el turismo, sepan recibir a los turistas. La idea es que ellos sean los guías locales de su territorio, entiendan su territorio y conozcan la biodiversidad, ya que nuestro volcán está ubicado, en cierta parte, dentro de una reserva de Cortolima, la Reserva Forestal Protectora Regional Machín, que son 459 hectáreas destinadas a la conservación, pero también para el aprovechamiento turístico y paisajístico. La idea es poder regular el tema del turismo en ese sector, porque en este momento se encuentra completamente desregulado. Estamos conformando con la comunidad una asociación campesina de turismo rural, científico y comunitario”.

Alexander Velásquez, docente del colegio Colombia, en Villamaría (Caldas). Se encuentra en la parte alta del municipio y hace parte de la zona de amortiguación del Parque Natural Nacional Los Nevados. La institución educativa impacta a las veredas Playa Larga, que es la que está más cerca al volcán; Papayal; Guayana; Pindo; Valles; Alto del Castillo; Santo Domingo; sedes de la alta montaña.
Importancia de la Bienal
“Siento que todo parte de un proceso de reconocimiento, reconocimiento del lugar que se habita y cómo nosotros constituimos ese lugar y cómo ese lugar nos constituye a nosotros, entendiendo que en este caso convivir al lado de la alta montaña y de montaña de fuego, en este caso volcanes, pues no es sinónimo de desastre, sino de oportunidad, más que de otra cosa. La geosciencia como tal nos brinda la posibilidad de ubicar la educación en un contexto y para un contexto. Entonces, este ejercicio más que un proyecto adicional, se convierte como en la columna vertebral de quienes habitan la alta montaña y la educación coge oficio dentro de un territorio y de una comunidad. Eso prácticamente es lo que se busca. A partir de los niños, aprende la comunidad”.
En clase de prevención
“Pienso que todo parte de cómo convivimos, ¿qué es eso de ser vecino de un volcán? Es como cuando usted convive con su señora, ¿Qué es eso? Convivir con ese otro cuerpo que tiene una serie de características y comportamientos cotidianos con los que usted tiene que interactuar y que son interdependientes. Creo que es más desde ahí, más desde la convivencia del local de lo que se está, en este caso, la ruralidad juega un papel muy importante por la sensibilidad de compartir con el volcán. La visión de un niño de nosotros es distinta, por ejemplo, a la visión de un niño de la ciudad. Pero lo que tenemos que tener en cuenta es que, sea de Manizales, de la cabecera urbana o rural, sea de Villamaría, cabecera urbana o rural, todos tenemos encarnado el volcán. Y eso lo debemos de llevar todos presentes. ¿Cómo lo llevamos encarnado? Tenemos emisión de ceniza continua que nos está visitando la roca pulverizada en cualquier latitud de nuestro territorio. Uno, nuestra agua viene de allá, Y de todos los brazos que tiene el volcán, o sea, que nos estamos mutuendo con él. Muchos de la forma de desarrollo económico de nosotros, como manizaleños o villamarianos, tiene que ver gracias al volcán. Y así todo eso es entender que el volcán hace parte de nosotros y nosotros de él. Y que más bien tenemos que tener una convivencia continua de reconocimiento para poder actuar en determinado momento de la manera más natural. Eso es lo que se está buscando”.
La importancia de los docentes en la prevención

Foto I Freddy Arango I LA PATRIA. Gloria Patricia Cortés Jiménez, profesional especializado del Servicio Geológico Colombiano y el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Manizales:
“La idea es que a futuro, y ya ha pasado un tiempo importante, en los pensum de los colegios debe estar el tema de gestión de riesgo o el tema de los fenómenos naturales. Ojo, fenómenos. Los desastres no son naturales. Los desastres son construcciones sociales por omisión.
Entonces, el propósito es que estos temas de nuestro planeta Tierra, de la geología y todos los procesos se conozcan desde las aulas. Como aún no está tan claro, hay una opción que es a través de los Proyectos Ambientales Escolares (PRAE).
Sin embargo, tratamos de buscar aliados y como Servicio de tener instituciones piloto e ir vinculando docentes, algunos por designación, otros porque ya casi que hasta nos han buscado. Entonces, con ellos detrás de todas estas instituciones están ellos liderando el trabajo con los niños. Es un proceso piloto.

Foto I Cortesía Servicio Geológico Colombiano I LA PATRIA
“En la Octava Bienal tuvimos 36 delegaciones de instituciones de todo el país. También otras de grupos comunitarios y una biblioteca, con ellos más de 250 niños, con quienes queremos que esa semilla siga creciendo. Y cada vez esta estrategia se conserve porque vemos que en los niños, las niñas y los jóvenes está la clave para que con sus comunidades y sus padres la gestión de riesgo sea exitosa”.

Foto I Cortesía Servicio Geológico Colombiano I LA PATRIA. Actividades artísticas formaron parte de la Bienal que se llevó a cabo en Armero-Guayabal.