Fotos | John Fabio López UNAL | LA PATRIA
Ensayo en la Granja Mario González Arana (UNAL Sede Palmira) con 105 pollos distribuidos en 5 tratamientos y 3 réplicas por grupo. Este descubrimiento científico transforma la avicultura en Colombia.
Una mezcla natural de extractos de ajo, cúrcuma, canela y orégano logró reducir en hasta un 90 % la presencia de Eimeria spp., el parásito intestinal responsable de la coccidiosis, una enfermedad que compromete la salud digestiva de los pollos de engorde.
Este hallazgo, desarrollado en la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), representa una alternativa sostenible a los tratamientos químicos tradicionales.
Con una producción mensual cercana a los 80 millones de aves, Colombia es uno de los líderes regionales en avicultura. Por eso, cualquier avance que mejore la salud de las aves y la eficiencia productiva tiene un impacto económico y ambiental significativo.
“El uso de fitobióticos podría ahorrar toneladas de alimento por ciclo de producción, reducir el uso de medicamentos y proteger la salud intestinal de las aves”, afirma el médico veterinario John Fabio López González, investigador de la UNAL.
¿Qué es la coccidiosis y por qué es tan crítica?
La coccidiosis es causada por protozoos del género Eimeria, parásitos microscópicos que destruyen el epitelio intestinal —la capa encargada de absorber nutrientes—. Esto deteriora el crecimiento, el rendimiento y la salud de las aves.
Según estudios nacionales, el 92,8 % de las granjas avícolas en Colombia presentan esta infección, lo que evidencia su distribución masiva en el país. La presencia del parásito, incluso sin síntomas visibles, provoca pérdidas significativas al aumentar el consumo de alimento para obtener el mismo peso corporal.
Por ejemplo, si un pollo requiere 100 gramos adicionales por kilo de carne debido al daño intestinal, en una producción de 80 millones de aves al mes, el sobreconsumo se traduce en toneladas de alimento perdido y millones de pesos en costos adicionales.
El problema de la resistencia a los tratamientos químicos
Durante décadas, el control de la coccidiosis ha dependido del uso de ionóforos y anticoccidiales químicos añadidos al alimento de las aves. Aunque efectivos, su uso prolongado ha generado resistencia en las poblaciones de parásitos, además de potenciales residuos en carne y órganos, lo que ha encendido alertas sanitarias a nivel internacional.
En países como Estados Unidos, más del 50 % de la producción avícola ya se clasifica como Raised Without Antibiotics, lo que prohíbe estos compuestos y empuja a la industria global hacia soluciones más naturales.
Fitobióticos: plantas que salvan millones de aves
En el estudio de la UNAL, López evaluó una mezcla de extractos vegetales —conocidos como fitobióticos— con compuestos activos como alicina (ajo), curcumina (cúrcuma), cinamaldehído (canela) y carvacrol (orégano). Estas sustancias poseen propiedades antiparasitarias, antimicrobianas y antioxidantes.
La investigación se llevó a cabo en la granja Mario González Arana de la UNAL Sede Palmira, con 105 aves divididas en cinco grupos de tratamiento, incluyendo controles negativos y positivos, así como diferentes concentraciones del preparado natural.
El uso de compuestos vegetales como fitobióticos no solo ofrece una opción natural contra uno de los principales desafíos sanitarios de la avicultura, sino que contribuye a la seguridad alimentaria, la sostenibilidad ambiental y la salud pública.
El magíster López durante las pruebas de laboratorio. Foto: John Fabio López, magíster en Ciencias – Farmacología de la UNAL.
Resultados del estudio: menos parásitos, más eficiencia
Los resultados fueron contundentes:
-
Reducción del 85 al 90 % de los ooquistes del parásito (estructuras reproductivas).
-
Recuperación intestinal más rápida, especialmente desde el día 21 del ensayo.
-
Menores lesiones en intestinos: sólo entre 13 % y 33 % de aves mostraron daño leve, frente a lesiones severas en grupos sin tratamiento.
-
Mejora en la conversión alimenticia: en granjas de 50.000 aves, la reducción del índice de conversión de 1,45 a 1,42 puede significar hasta 4 toneladas menos de alimento por ciclo, equivalentes a 8 millones de pesos en ahorro.
Parte de un enfoque integral de producción avícola
López aclara que el uso de fitobióticos no es una solución aislada, sino parte de una estrategia integral que incluye:
-
Control sanitario estricto.
-
Evitar el hacinamiento.
-
Limpieza y desinfección entre ciclos.
-
Nutrición balanceada y manejo preventivo.
Este enfoque representa un paso firme hacia una avicultura más sostenible, responsable y eficiente, alineada con las nuevas exigencias del mercado y el bienestar animal.
* Esta información se elaboró en colaboración con la Agencia de Noticias de la UNAL.
Haga clic aquí y encuentre más información de LA PATRIA.
Síganos en Facebook, Instagram, YouTube, X, Spotify, TikTok y en nuestro canal de WhatsApp, para que reciba noticias de última hora y más contenidos.

