La economía necesita prender motores de nuevo, y hacerlo con fuerza, con impulso, buscando que en poco tiempo esté superada la crisis generada por la pandemia de covid-19. Ojalá muy pronto se comiencen a ver resultados concretos que ayuden a dejar atrás los números rojos en los balances empresariales y que condujeran a una franca caída en el alto nivel del desempleo que tenemos hoy, que en el caso de Manizales se ubica en 25,3% al cierre de agosto.
Este indicador es apenas una muestra de lo que puede estar ocurriendo en Caldas y que significa menos ingresos para los hogares. En ese sentido el proyecto de construir placas huella en varias regiones caldenses, con una inversión de $30 mil 500 millones, impulsado por la Gobernación de Caldas y los alcaldes del departamento, es vital para mover las economías locales y generar puestos de trabajo en buena cantidad y en forma más rápida que en los grandes proyectos.
Sin embargo, hay que ser realistas y ver que esa recuperación, si es que logramos mantener un manejo adecuado de la emergencia sanitaria, tomará tiempo, y que en buena medida serán las grandes obras de infraestructura que actualmente se acometen las que abrirán las posibilidades de mejora en el mediano plazo. El hecho de que el corredor férreo de La Dorada pueda tener una mejor dinámica hasta Chiriguaná (César) en diciembre próximo, y que Pacífico Tres avance a buen ritmo, con la idea de estar concretando sus tareas en cerca de un año, permite pensar en que serán esos los puntales de lanza de la recuperación de fondo en la región.
En el caso de Pacífico Tres los ahorros en tiempo de desplazamiento hacia Medellín, pero también la más rápida comunicación que se tendrá desde Antioquia hacia el Valle del Cauca, gracias al túnel de Tesalia que tiene hoy avances significativos, nos ayudarán a ser más eficientes y productivos en la región. Esta es una obra que generará nuevos polos de desarrollo a lo largo del corredor que cruza en el occidente del departamento y dará vida a múltiples actividades productivas en toda la región. Cuando se concrete Aerocafé estas vías serán fundamentales.
Ante el actual panorama, más que recuperar lo perdido es necesario apuntar a lograr un empujón suficiente que nos lleve a crecer más rápidamente y a ser más competitivos en poco tiempo. En esto, también hay que destacar los trabajos que se desarrollan en la doble calzada Manizales - Pereira - Armenia, así como los beneficios que comenzarán a sentirse de tener en funcionamiento el túnel de La Línea. Así lo considera el Observatorio de Infraestructura de Caldas, que tiene claro que entre los sectores que más necesitan mano de obra está precisamente el de las obras públicas.

Los desafíos de la región son grandes en materia de reactivación y en ver la manera de volver a encarrilar los propósitos de desarrollo y crecimiento en los que se venía trabajando antes de la pandemia. Los riesgos de tener que retroceder si se pierde el control de la emergencia son reales y podrían significar graves retrasos que podrían salir muy costosos. Hay que lograr que, de manera pausada, pero firme, superemos esta situación y podamos pronto acometer la soluciones de fondo que se necesitan para tener un mejor futuro para todos.