Vemos constantemente a miles de personas que teniendo grandes cualidades, dones y talentos, creen no servir para nada, constantemente se autosabotean y creen que la vida no tiene un sentido real para ellas. Muchas de estas personas, incluso no se dan cuenta de que se están autosaboteando, ya que esta forma de actuar es totalmente inconsciente y no entienden por qué están adoptando ciertos patrones de comportamiento.
Las personas pueden autosabotearse por una variedad de razones, y a menudo es un comportamiento complejo y multifacético que puede ser influenciado por factores emocionales, por creencias limitantes que arrastran del pasado y por situaciones vividas que han quedado en el subconsciente.
Te has preguntado alguna vez: ¿Será que tú eres una persona que se autosabotea? Revisa a fondo si algo de esto te suena conocido:
1. Miedo al fracaso: ¿Prefieres no arriesgarte por el miedo a no cumplir con las expectativas que se tienen de ti?
2. Perfeccionismo: ¿Estableces estándares muy altos y si no los cumples sientes que no eres lo suficientemente bueno, sufres y te amargas la vida?
3. Patrones de pensamientos rígidos y negativos: ¿Tienes constantemente pensamientos autocríticos y negativos que influyen en tu capacidad de enfrentar desafíos de manera positiva y constructiva?
4. Experiencias pasadas: ¿Has pasado por traumas, rechazos o fracasos que dejaron cicatrices emocionales que influyen en la forma en que te enfrentas o huyes cuando tienes nuevas situaciones?
5. La forma en que fuiste educado o programado: ¿Hay experiencias en tu infancia, como críticas constantes o falta de apoyo, que pueden influir negativamente en tu presente y hacer que no creas en ti?
6. Querer ser aprobado por la sociedad: ¿El temor a ser juzgado o rechazado por los demás te ha llevado a evitar situaciones en las que podrías ser evaluado?
7. No querer tener compromisos: ¿No quieres comprometerte con ciertas tareas, y prefieren decir que no eres bueno en eso o que no tienes tiempo?
Es importante aprender a autoevaluarnos, en lugar de criticarnos, ya que cuando nos criticamos buscamos incansablemente todos nuestros defectos, fallas y errores y los utilizamos solamente para lamentarnos y autodestruirnos, mientras que cuando nos autoevaluamos ya no somos parte del problema sino de la solución, pues nuestra mente está dirigida a resolver los conflictos, analizar los hechos y buscar resultados.
La única forma de cambiar esta percepción errónea que tenemos de la vida es mirándola desde otro punto de vista diferente, aprendiendo a reírnos de nosotros mismos y de nuestras debilidades y defectos, porque recuerda siempre que por más en serio que te tomes la vida, jamás podrás salir vivo de ella, entonces gózatela.
www.papajaime.com