Para el embajador Benedetti
Señor director:

En la Biblia leemos lo siguiente:
“Anda y dile a ese funcionario de palacio... ERES LA VERGÜENZA DE LA CORTE DE TU SEÑOR... Te quitaré de tu puesto, te destituiré de tu cargo (Isaías 22, 15. 18c-19).
Atentamente, Ciudadano

¡Pobre Venezuela!
Señor director:

La dictadura del hermano país arregló muy “bien” las cosas: el Consejo Electoral le dio apenas el 51% a Maduro para que el mundo crea que por ese margen mínimo ganó en franca lid; le dio el 44% a don Edmundo para que el mundo crea que por ese alto porcentaje la elección fue transparente.
La Revolución Cubana ha tenido esclavizada la Isla durante ¡sesenta y cinco años! 
En Nicaragua el sátrapa Ortega y la bruja Rosario Murillo manejan el país como si fuera una finca de su propiedad. Y Venezuela lleva un cuarto de siglo “en la inmunda”, en la olla.
“Y ahora ¿quién podrá defendernos?”
Atentamente,
Don Cecilio

Periodismo en Manizales
El ejercicio del periodismo es fantástico y lo disfrutamos quienes hemos hecho carrera en la práctica desde hace años, alternando, como en mi caso con la profesión de abogado; al igual que algunos con la docencia y diferentes carreras. Muchos surgieron recientemente, teniendo como único oficio esta labor, desempeñándose en los diferentes medios, sobre todo de manera independiente. Los comunicadores sociales y periodistas son formados en la Universidad, la inmensa mayoría dedicados a trabajar en las entidades del Estado y en la empresa privada.
Cada quien rema para su lado en busca de su subsistencia, entre tanto el colegaje es inexistente porque cada uno se cree único y omnímodo, como describe el constitucionalista Juan Bodino, “la descalificación de unos con otros es deplorable y lamentable”. Es urgente que se promuevan seminarios, talleres en los que se enseñen valores tan importantes como la moral y la ética, se haga énfasis en el respeto por los demás, sentido de solidaridad y humanización. Es infinita la responsabilidad para comunicar, y se debe hacer con coherencia, prudencia, objetividad y si como seres humanos que somos imperfectos, erramos, tener la capacidad de corregir. Razón tuvo el poeta británico Alexander Pope, quien vivió entre 1688 y 1744, al expresar: “Errare Humanum Est” o sea errar es humano, agregando, “perdonar es divino, rectificar es de sabios”. Para dignificar el ejercicio del periodismo, primero hay que dignificar al ser humano.
Alvaro Alzate Ussma.
 

Sección
Fecha Publicación - Hora
Metadescripción

Voz del lector