Le pareció de mal gusto
Señor director,
De muy mal gusto la columna del Sr. Álvaro Gartner del 25 de agosto, titulada “Pobre Caldas”. Una cosa es estar en desacuerdo con los planteamientos de una persona y otra es faltarle al respeto. Artículos como ese solo dejan en claro que tipo de persona es quien lo escribe.
Atentamente,
Una ciudadana
Como el antioqueño
Señor director:
Estamos como el antioqueño que decía:
No sé si me vaya o si me quede,
asunto que no puedo resolver:
si me voy, quién sabe qué sucede;
y si me quedo, vayan ir viendo a ver...
Porque la cabeza nos hace pensar que la teoría política, ambiental y del Estado, que predica el presidente Petro, es la correcta y verdadera, pero las medidas que toma, los nombramientos que hace, sus desplantes, ausencias y retardos, los continuos desplazamientos dentro y fuera del país...¡Hágame el favor!
Atentamente,
Ciudadano
Judicial y jurisdiccional - II
Señor director:
El adjetivo castellano JUDICIAL viene del adjetivo latino IVDICIALIS, IVDICIALE; el sustantivo es IVDICIVM= juicio. Y el adjetivo JURISDICCIONAL viene de IVRISDICTIONALIS, IVRISDICTIONALE, adjetivo cuyo sustantivo o expresión sustantivada es IVRIS DICTIO= dictamen del derecho, sentencia.
Todo lo judicial es jurisdiccional, pero no todo lo jurisdiccional es judicial. Por eso es impropio decir o escribir “rama jurisdiccional del poder”. El poder es la jurisdicción, la cual se divide en tres ramas, y una de ellas es la judicial.
Si vamos a la Lógica de Aristóteles, la lógica formal o clásica, que también es la de la Escolástica medieval, tenemos que “jurisdiccional” es género, y “judicial” es especie (lógica).
Atentamente,
Padre Jaime Pinzón M.