Parque Euskadi en Manizales, un homenaje a nuestros ancestros vascos

Señor director:

Quién no tiene en Caldas en nuestra sangre un antepasado originario de las provincias vascongadas o del País Vasco o de Euskadi como se llama en el idioma vasco, región ubicada en el norte de España, pues para ello no es sino ver los apellidos que llevamos desde el Aguirre, Alzate, Anzola, Aristizábal, Arteaga, Arrubla, Atehortúa, Avendaño, Barreneche, Chavarriaga, Echeverri, Idárraga, Isaza, Galarza, Garay, Gaviria, Mendieta, Montoya, Lizcano, Loaiza, Ochoa, Olarte, Orozco, Orrego, Ospina, Salazar, Saldarriaga, Uribe, Urrea y hasta el Zuluaga, ya que se han contabilizado en la zona paisa (Antioquia, Caldas Quindío y Risaralda) más de 3.500 apellidos de origen vasco, a nivel mundial somos la segunda población con más descendientes después de Argentina, solo que la migración de familias de colonos campesinos, mineros, comerciantes, educadores, militares, administradores y clérigos llegaron a nuestras tierras desde los años de 1500 hasta 1800, y aunque hace 200 años no llegan más emigrantes de ninguna parte del mundo a nuestra tierra.

Los vascos tuvieron un impacto muy grande en la consolidación de nuestras costumbres o tradiciones como ser una región en donde aún se tiene el respeto a la palabra dada y el respeto al padre, en donde predomina la religiosidad, somos individualistas, laboriosos, algo testarudos y conservadores en nuestros hábitos, algo egoístas pero también alegres, con buen oído musical y con alma de andariegos dispuestos a emigrar en cualquier momento a cualquier parte del mundo. También se refleja nuestra herencia vasca en la dieta culinaria a base de carne de cerdo, frijoles y chorizo y algo de la vestimenta tradicional campesina de alpargata, traje blanco y pañuelo rojo al cuello, no es sino ver nuestras danzas folclóricas hasta el baile del machete.

En Caldas se tiene algunos nombres de pueblos con apellidos vascos como Aranzazu, Marulanda y La Victoria que originariamente se llamaba Vitoria como la capital de Álava (una de las provincias del país vasco junto con Guipúzcoa y Vizcaya) y por qué no también Navarra de donde es originario el Arellano, Jaramillo y Ruiz y su afición reconocida a los toros en la fiesta de San Fermín. Así pues, ¿por qué no crear un espacio, un parque, una plazoleta con un monumento a nuestros antepasados anónimos que nos dieron nuestros apellidos y de nuestra identidad regional?, pues en el ADN de un paisa cualquiera, un alto porcentaje es de origen vasco y cuando llega un turista de esos lares ven con asombro su semejanza con su tierra en los nombres de los negocios y hasta en la topografía de nuestras montañas y ¡qué casualidad! hasta las banderas tienen los mismos colores, verde, blanco y rojo. Sería importante de fomentar una hermandad de Manizales o de Caldas con el País Vasco para que haya más intercambio cultural, comercial, educativo, industrial, etc.; es de anotar que en Medellín nos llevan ventaja, como siempre, pues hace 15 años tienen el Centro de Estudios Vascos de Antioquia. En Manizales en el año 2009 se tuvo un acercamiento para el fortalecimiento de la relaciones entre el País Vasco y la Cámara de Comercio de Manizales y la Secretaria de las TIC y Competitividad de la Alcaldía, pero nadie sabe en qué quedó dicha reunión y si ha transcendido en algo. Estamos pues en mora de reconocer nuestras raíces vascas y hacer un homenaje a nuestros mayores que aun cuando no los conocimos, estamos marcados por sus apellidos el resto de nuestras vidas y generaciones venideras y así no les guste a algunos, no podemos renunciar a nuestro ancestro vasco, pues hay otras regiones del país que tienen mayoría de sangre de origen afro y/o americana o mestiza y tienen sus monumentos a sus antepasados de los cuales están orgullosos, necesitamos pues un espacio colectivo en la ciudad para honrar nuestros apellidos, porque antes de la “colonización antioqueña” hubo una diáspora de vascos que formaron la idiosincrasia de la región paisa y nos dio la identidad regional, ellos también tienen derecho a ser reconocidos, así pues una vez entre en funcionamiento la Secretaria de Cultura y Civismo de la Alcaldía de Manizales, y si ésta nos define e indica el área para ubicar este nuevo mobiliario urbano, de tal manera que los parques vuelvan a ser espacios culturales (podría ser en el parque de la esquina de la calle 64b con carrera 27 enseguida del parque de las garzas), la comunidad se encargará de hacerlo. Para los que deseen profundizar en el tema, les recomiendo el libro de John Alejandro Ricaurte Cartagena Los vascos en Antioquia durante el reinado de los Austrias (1510- 1700).

Gabriel Eugenio Tobón Correa

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