La voz se le entrecorta mientras recuerda su pesadilla y lo que sigue padeciendo por cuenta de su expareja, un sujeto que la maltrató durante tres años. Se siente sola porque dice que no hay autoridad que la escuche, pero se llena de fuerza para no dejar que las lágrimas le ganen. Dice que seguirá luchando, porque ya no tiene nada qué perder.

Luego de denunciar al hombre que la sometió a maltratos físicos, verbales y psicológicos en Manizales, la Fiscalía actuó y lo capturó por violencia intrafamiliar agravada. Tras presentarlo ante un juez de control de garantías, en enero pasado, este lo dejó en libertad y vinculado al proceso.

Pero saber que ya se enfrenta a un delito que podría darle entre 4 y 8 años de prisión parece no ser suficiente para este supuesto maltratador, quien la sigue persiguiendo, la amedrenta, le pide que vuelvan y hasta acude al abogado para intimidarla, según relata la afectada.

El inicio de la pesadilla

Ella empezó a padecer las agresiones en septiembre del 2019 en la zona rosa de Manizales. Dentro de un carro la insultó y la haló fuertemente de los brazos. Después de eso, en otra ocasión la intentó asfixiar tras tomarla del cuello, la lanzó contra las paredes y le dijo que solo podría bañarse cuando él se lo permitiera.

También la dejaba incomunicada y la abusó sexualmente. Le quitaba el teléfono, las llaves del carro y en medio de palabras obscenas le decía que ella tenía amantes. En septiembre del año pasado la retuvo contra su voluntad dentro de la vivienda.

Libertad de asediarla

Tras las audiencias realizadas en enero, la víctima esperaba tener un poco de tranquilidad y hasta decidió cambiarse de vivienda para evitar tener contacto con su agresor. Sin embargo, este logró encontrarla nuevamente.

Le pedía que hablaran, que él había cambiado y que deseaba que volvieran para arreglar las cosas. Pero ante la negativa, le quitó el celular, las llaves de su vehículo, las de la casa y se fue. Tuvo que ir a buscarlo hasta la vivienda de la madre de él y tras mucho rogarle, esta le confesó que debía reclamarlas en el negocio del exesposo.

Amenazó luego con contarles a los familiares de la mujer, incluidos a los dos hijos de ella y al exesposo sobre todo lo que ocurría, con la historia amañada a su antojo. Ella dice que luego de tanto temer que él la expusiera, no cederá a sus chantajes y quiere afrontar la situación, que la gente sepa el tormento por el que atraviesa.

La mujer denunció que desde que decidió enfrentar a su agresor y luego de las audiencias de enero quedó sola y que ninguna autoridad le ha puesto cuidado. Dijo que este hombre amenazó con perjudicarla en lo personal y en lo laboral si no se retractaba de lo que había dicho.

El martes pasado se llevó a cabo otra audiencia por violencia intrafamiliar, esta vez ante un juzgado de Ibagué, pero se suspendió debido a que la víctima no cuenta con un defensor. Reclamó porque no la buscan y cuando ella lo intenta, nadie le da razón.

Hoy, en medio de la incertidumbre y luego de secarse las lágrimas, dice que seguirá en la lucha. No teme a lo que pueda ocurrir de aquí en adelante, no va a dar el brazo a torcer y quiere que las mujeres, así como ella, se llenen de fortaleza y enfrenten a sus agresores.

LA PATRIA se intentó comunicar con la Defensoría del Pueblo para saber a qué se debía que no le asignaran abogado a la víctima y al cierre de esta edición no se obtuvo respuesta. La Fiscalía indicó que la próxima semana se analizará el caso.

Amenazas de muerte

A la vivienda de la mujer han llegado panfletos en los que amenazan con hacerles daño a sus familiares. Estos le llegaron al exesposo de ella.

Se hace pasar por ella

La afectada sostiene que el denunciado la amenaza para que desbloquee su celular, se hace pasar por ella para conversar con otros hombres, a quienes seduce y les pide fotos íntimas. Un amigo de ella se percató y le avisó.

No están solas

El Movimiento Causa Justa Feminista indicó que existen casos de mujeres víctimas que llegan hasta una parte del proceso, se desvinculan y no se vuelve a saber de ellas. Ante esa sensación de que están solas, pueden acceder a otras entidades distintas de las oficiales que pueden acompañarlas en el proceso con representación jurídica y acompañamiento.

La Universidad de Caldas, por ejemplo, cuenta con la Comisión de Género y un laboratorio de violencia vinculado con la Secretaría de la Mujer. La Casa de la Mujer, ubicada diagonal al parque Faneón, también puede orientar a la víctima con abogadas, psicólogas y sociólogas.

Aunque hoy se presentan más denuncias, indica Causa Justa, esto también se debe a que hay más movimientos y las instituciones se han preocupado por contar con comisiones enfocadas en estos problemas que ayudan a evidenciar la situación.

Municipios como Viterbo, La Dorada y Anserma presentan altos índices de violencia contra la mujer y en los trabajos que realiza el movimiento se evidenció que a las afectadas aún les cuesta hablar sobre el tema y asumir que son víctimas de cualquier tipo de violencia contra ellas.

Las cifras de la Procuraduría

- En el 2022 se registraron 47.771 casos de mujeres víctimas de violencia intrafamiliar en el país, cifra que en comparación con el año 2021, presentó un aumento de 7.713 casos.

- El reporte de exámenes médicolegales por presunto delito sexual en mujeres aumentó en 3.650 casos en el 2022, frente a lo reportado en el 2021.

- En lo corrido del 2023 (hasta marzo), se registraron 3.483 casos de violencia intrafamiliar y 1.516 exámenes médicolegales efectuados por presunto delito sexual.

Denuncie

Cuando una mujer es víctima de maltrato intrafamiliar no es necesario poner una denuncia, sino que la investigación se realiza una vez se conocen los hechos. A la afectada se le pide acudir a las entidades en sus municipios como ICBF, Fiscalía, Defensoría del Pueblo, hospitales o Policía o comunicarse con las líneas 105 y 123.