Los docentes de Risaralda volvieron a salir a las calles para manifestar su inconformidad con el modelo de salud que todavía no se normaliza y que sigue presentando riesgos para ellos y sus familiares. 

Este año han salido al menos cuatro veces mostrando su inconformidad porque el nuevo modelo, que entró en operaciones en mayo de 2024, aún no funciona como lo hacía el modelo pasado, generando retrasos en las citas, falta de medicamentos y teniendo poco personal. 

Vías cerradas

La marcha de hoy jueves (30 de octubre) empezó en Makro Dosquebradas y tiene como destino final la sede de la Fiduprevisora en la calle 14 con carrera 21, haciendo una parada intermedia en la Alcaldía de Pereira. 

Por lo tanto, estará cerrada mientras avanza la marcha, la avenida Simón Bolívar (desde Makro con sentido hacia Pereira), el viaducto César Gaviria Trujillo, la carrera séptima entre calles 11 y 19, la carrera octava entre calles 19 y 14. Y luego la calle 14 entre carrera 8 y carrera 21, donde realizarán los docentes un plantón. 

Motivos de la marcha

El Ser (Sindicato de Educadores de Risaralda) y la Cut (Central Unitaria de Trabajadores) lideran la marcha, donde además de las peticiones por la salud, hacen arengas sobre la reforma a la salud que sigue estancada y la crisis diplomática entre Estados Unidos y Colombia. 

Durante la movilización en Pereira, James Rodríguez Ossa, secretario de prensa y publicaciones del Sindicato de Educadores de Risaralda (SER), explicó que una de las principales exigencias es que las IPS se acojan al manual tarifario establecido, lo que garantizaría una atención médica digna y oportuna a los docentes y sus familias.

“Estamos defendiendo la Ley 91 de 1989 y exigiendo que se cumplan los acuerdos con la Fiduprevisora. Pedimos que se estabilice el modelo de salud para los maestros en Risaralda y en todo el país”, señaló Rodríguez Ossa.

El dirigente sindical añadió que, aunque en Risaralda el proceso de contratación con las IPS avanza de manera satisfactoria, aún existen algunas clínicas y hospitales que no se han acogido al manual tarifario, lo que podría retrasar la plena implementación del nuevo modelo.

“Podemos dar un balance positivo hasta ahora, porque el problema más grave era la contratación, y se ha venido avanzando. Esperamos que el primero de noviembre ya estén todos los contratos firmados”, agregó.

Exigencias al Congreso y rechazo a la injerencia extranjera

Los educadores también dirigieron su mensaje al Congreso de la República, exigiendo la presentación de la Ley Orgánica que reglamenta el Sistema General de Participaciones (SGP), fuente de financiación de sectores esenciales como la educación, la salud y el mantenimiento de infraestructura pública.

“Necesitamos que el Congreso debata la nueva ley de salud. Si la estructura del sistema está mal, los maestros y sus familias siempre terminan afectados”, puntualizó Rodríguez Ossa.

Por su parte, Lina Montilla, ejecutiva nacional de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), expresó que la jornada también tiene un componente político y de defensa nacional.

“Nos movilizamos para exigir respeto por la soberanía y la autodeterminación de los pueblos. Rechazamos la injerencia extranjera y las acciones de Estados Unidos en la política interna de Colombia”, afirmó.

La jornada de paro, aún se desarrolla en la capital risaraldense y en el municipio industrial, dejando a su paso tanto las arengas de los docentes y trabajadores, y también largas filas de vehículos esperando el tránsito en la avenida Simón Bolívar y la avenida del Ferrocarril.

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