En el hogar de los Agudelo Ramírez, en Chipre, el ajedrez es el deporte rey. Los hombres de la casa lo juegan: Horacio y sus dos hijos: Jacobo y Santiago; María Camila, la esposa y la madre, es espectadora.

Allí tienen cinco tableros para jugar, uno de ellos está colgado en la pared, con el que el padre y entrenado enseña los sistemas, las jugadas, las estrategias y todo lo demás.

Horacio fue jugador de la Liga, incluso también lo transmite en Enroque, el club al que pertenece, y en el Instituto Chipre, en donde es docente.

"Lo hago como parte del programa de educación física y en el área artística. Quienes jugamos ajedrez somos creativos".

Jacobo, el hermano mayor, también empezó al lado de su padre, pero el que sí parece tener toda la pasión y condiciones es Santiago, el menor, quien acaba de ser doble campeón nacional.

Santiago empezó a jugar a los 4 años: "A los dos les enseñé y Agustín Nieto, Maestro Fide, basado en un perfil en el que se define al ajedrecista, me dijo que el que iba a ser jugador de alto rendimiento era Santiago y no Jacobo".

El ajedrez es uno de los pocos deportes que enfrenta a rivales de todas las edades y condiciones físicas. Acá vale la capacidad intelectual para mover las fichas.

"Ese fue un obstáculo que encontramos. Santiago no entendía cuando le tocaba jugar con mayores y se ponía a llorar. Se asustaba, pero finalmente les ganaba".

Con tres años en el mundo del ajedrez, Santiago ha sido campeón de los torneos locales, regionales y nacionales. La semana pasada logró dos más en el Campeonato Nacional Sub-8.

Lo hizo en ajedrez activo y ajedrez blizt.

El año pasado, incluso, fue cuarto en el Campeonato Sudamericano de Uruguay después de haber sido campeón nacional en Barranquilla.

"Tuvo también la oportunidad de ir a Brasil, pero la mamá no lo dejó ir porque estaba muy niño, muy pequeño, son cosas que hay que entender", recuerda hoy Horacio, su padre.

La semana entrante representará al país en el Panamericano de Lima (Perú).

Santiago cursa hoy el segundo grado en el colegio virtual Monte Rosales. Su padre dice que el ajedrez le ha servido para mejorar los procesos formativos en su educación formal.

"Le ayuda mucho en la conexión, el pensamiento lógico matemático, la lectura crítica y las resoluciones de problemas".

Simultánea

Santiago jugará el próximo fin de semana una simultánea con 30 jugadores más, de todas las edades, en el Parque de Villamaría.

Su Elo

Blitz: 1.710

Activo: 1.700

Clásico: 1.541