En enero se conocerían algunas decisiones frente a la nueva concesión.

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En enero se conocerían algunas decisiones frente a la nueva concesión.

LA PATRIA | MANIZALES

Los peajes de Pavas y San Bernardo del Viento son dos de los puntos que se deberían  eliminar en la próxima concesión que se adjudique en el Eje Cafetero, en reemplazo de Autopistas del Café.

Por lo menos esta fue la opción que se planteó durante la reunión del pasado martes en Bogotá con dirigentes gremiales y políticos de Caldas y el presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Francisco Ospina; la Superintendente de Puertos y Transporte, Ayda Lucy Ospina y el vicepresidente de Estructuración de la ANI, Luis Eduardo Acosta.

Las mesas se adelantan, teniendo en cuenta que el actual contrato con Autopistas vencerá en el 2027, motivo por el cual el Grupo Odinsa, accionista mayoritario del actual contrato, solicitó seguir administrando estas vías del Eje por 30 años más, a través de una nueva propuesta de concesión, bajo el nombre de Iniciativa Privada (IP) Conexión Centro.

Aunque en el Eje Cafetero, en términos generales, están de acuerdo con que el modelo de concesiones representa la mejor opción para abordar los desafíos de conectividad en el país, el reclamo principal de Caldas se centra en una mayor equidad.

 

Suena la propuesta

De acuerdo con el representante a la Cámara por Caldas del partido Alianza Partido Verde y Pacto Histórico, Santiago Osorio Marín, quien estuvo presente en el encuentro, aunque es necesario aclarar que aún no hay una decisión definitiva de parte del Gobierno, sí le sonó la propuesta de quitar algunos puntos, ya que de las 7 casetas que hay en el corredor vial de 256 kilómetros entre Caldas y el Quindío, 5 están en Caldas, y 3 de ellos en las zonas de expansión de Manizales.

Según el congresista, lo positivo es que los dirigentes nacionales no solo escucharon, sino que indicaron que el papel está en blanco para replantear totalmente el contrato de concesión que hoy se tiene con Autopistas del Café. Eso significa que la propuesta que presentó Odinsa no se tuvo en cuenta, según las conclusiones de la mesa de trabajo. "Eso es un hecho importante porque un Gobierno que se ha visto distante del sector empresarial hoy coincide con nosotros que algunos peajes deben ser eliminados y que lo mejor para la competitividad de Caldas es eliminar Las Pavas y San Bernardo", ratificó.

 

Por lo menos uno

El Comité Intergremial de Caldas (CIC) propuso que solo sea uno, el peaje de Pavas, e incrementar los de Tarapacá 1 y 2 a una tarifa similar a la que se tiene entre Pereira y Armenia.

El estimado es que mientras un usuario del trayecto Manizales - Pereira paga $756 en la relación de costo peaje/kilómetro, entre Pereira - Armenia ese costo es de $507, una diferencia de $250, por lo que insisten en que por obvias razones de equidad se piden nivelar esas tarifas, ya que hasta ahora Chinchiná y Manizales tienen la peor carga de todas las regiones.

Con respecto a los peajes de Santágueda y San Bernardo, pidió unificarlos en uno solo, después de la glorieta de La Manuela, siempre y cuando se garanticen las obras solicitadas y haya tarifas preferenciales para las comunidades cercanas.

Para Osorio Marín la mesa de trabajo fue trascendental, pues aunque se han hecho varios encuentros, esta es la primera vez que la ANI se sienta con los gremios a hacer un estudio completo del proyecto. "Entonces esto no es un tiro al aire ni un globo y encontramos a un Gobierno receptivo para eliminar esos peajes, ante los planes de expansión de la región, los desafíos de conectividad y el peso económico que representa para Caldas tener cerca del 50% del peso de la concesión".

En medio de esta situación, la expectativa es que hacia enero del 2025 haya un nuevo encuentro y se concrete esta opción.

 

Una reunión positiva, pero hay que esperar

El presidente del CIC, Felipe Montes Trujillo, sostuvo que la reunión fue positiva, teniendo en cuenta que no solo los escucharon sino que pusieron las cartas sobre la mesa sobre la inequidad que hoy existe con la región. Sin embargo, recalcó que por ahora no hay una decisión clara al respecto, pues el Gobierno seguirá oyendo a las regiones y las nuevas propuestas que se presenten de posibles estructuradores interesados en la concesión, diferentes al grupo de Odinsa.

 


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