Foto | Luis Trejos | LA PATRIA // “La medicina representó mi mejor forma de servir y asumí ese camino desde muy joven”: Diego Armando Ospina Buitrago.
El médico Diego Armando Ospina Buitrago lideró el primer implante en Colombia de un marcapasos bicameral sin electrodos por una vía de acceso yugular (cuello), convirtiéndose esto en un caso destacado en lo regional. Se trata del segundo procedimiento de su tipo en Latinoamérica.
Este, que se dio en el SES Hospital Universitario de Caldas el 24 de octubre, benefició a Ritica López Naranjo. Sucedió en un momento en el que la paciente estaba en riesgo de fallecer.
“Ella necesitaba una estrategia segura. El dispositivo mide apenas veinticuatro milímetros y cambiará su calidad de vida y sus posibilidades de subsistencia”, especificó el experto, natural de Manzanares.
Su trayectoria
Ospina estudió su pregrado y medicina interna en la Universidad de Caldas. Luego, en Bogotá, cursó cardiología y electrofisiología clínica en la Universidad Javeriana. También tiene historia en el Hospital San Ignacio, en la Clínica Shaio, en el Hospital Departamental Santa Sofía y en la Clínica de La Presentación.
“Cuando conocí un laboratorio de electrofisiología descubrí un universo entero. Los electrocardiogramas me fascinan, de alguna forma entendí que podía dedicarme exclusivamente al sistema eléctrico del corazón”, resaltó el profesional.
El especialista trabajó como internista en Chinchiná y Manizales, antes de su especialización en cardiología. Hoy por hoy destaca el valor del examen físico y la observación directa en cada usuario.
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“Yo siempre disfruto hablar con los enfermos, conocer sus síntomas y entender sus contextos. Sé que detrás de cada signo aparece una historia", agregó Ospina, hablando de la cercanía con sus pacientes.
La electrofisiología, según el médico, le ha permitido ver cómo una intervención precisa cambia completamente una vida. Dijo que suspender un medicamento, corregir una taquicardia o implantar un dispositivo modifica el destino inmediato de una persona y le devuelve la estabilidad, la familia, el futuro.
El especialista relató que cada intervención exitosa reafirma su idea inicial de servicio. Su carrera ha crecido entre largas jornadas y un compromiso emocional fuerte con cada paciente: “La medicina siempre me ofreció un sentido profundo”.
Su historia académica y su liderazgo demuestran que la capacidad médica depende también de la sensibilidad humana. Hoy es un profesional reconocido en la ciudad, en el departamento y en el mundo.
Para replicar
“Resolver un caso así nos permitió enseñarle al país que la vía yugular funciona. En Sudamérica solo existía un antecedente y en Colombia ninguno. Esto abre posibilidades para otros pacientes y demuestra que la electrofisiología siempre exige creatividad, que no solo el acceso tiene que ser vía femoral (pierna)”.
LA PATRIA conoció que el procedimiento involucró al cardiólogo Lorenzo López, a Juan Felipe Betancourt, a Lukas Marcelo Ríos y a otros profesionales de la Unidad Cardio NeuroVascular del SES.
“Su respaldo significó muchísimo. El hospital también respondió con compromiso total, incluso en medio de un sistema de salud difícil y de una situación financiera, con algunas EPS, que es complicada. Hoy Ritica está tranquila, en su casa y eso es lo más importante", concluyó.
De su familia
El médico Diego Armando Ospina Buitrago es casado con Daniela Velásquez, con quien espera un bebé. Su mamá, Constanza Buitrago, es auxiliar de enfermería; mientras que su hermana, María Camila, es veterinaria. Recordó a su padre, Pedro Nel Ospina, ya fallecido, como una inspiración permanente.
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