Aún hay tiempo para que disfrute y aprecie la obra de la ingeniera química y artista manizaleña Olga Lucía Hurtado, quien presenta en la Galería del Centro Colombo Americano de Manizales la exposición El caos sensible, una muestra que reúne alrededor de una década de creación e investigación sobre el vínculo entre naturaleza, territorio y memoria ambiental.

Propuesta

En la exposición, curada por Cristina Mejía, la autora combina su formación científica con su sensibilidad estética para reflexionar sobre el impacto de la contaminación industrial y el papel del arte como medio de sensibilización ecológica. “El caos sensible es una recopilación de investigaciones y trabajos que comenzaron en el 2008, cuando logré unir mi profesión real, la ingeniería química, con mi vocación de toda la vida, que es el arte”, explicó Hurtado.

Zona industrial

El punto de partida de este proceso surgió desde su experiencia viviendo en la zona industrial de Manizales, donde fue testigo directo de los efectos de la contaminación en el entorno natural. Esa cercanía la llevó a registrar con su cámara las emisiones de las fábricas y la transformación de la quebrada Manizales, un ejercicio de observación que luego se convirtió en pintura, instalación y fotografía intervenida.

“Empecé a sensibilizarme mucho por la contaminación del agua y del aire, pero sin dejar de lado la admiración por el paisaje. Pinto lo que amo, pero también lo que me preocupa”, contó. En sus obras conviven la denuncia y la belleza, manchas de color que evocan ríos turbios, atmósferas cargadas y cielos que aún resisten.

Mezcló pintura e intervención de fotografías

Trayectoria

La obra de Hurtado consolidó su rumbo durante la maestría en Diseño y Creación Interactiva de la Universidad de Caldas, bajo la dirección de la profesora Adriana Gómez. Fue ahí donde dio forma a su discurso visual y presentó la serie Intervenciones alteradas del paisaje (2013), con la que comenzó a ser reconocida en la región.

Su proceso parte de la experimentación con materiales y pigmentos que remiten a la química, convertidos en herramientas de expresión artística. “Mi formación científica me ayuda a entender cómo se comportan las materias con las que trabajo, pero lo que realmente me mueve es lo emocional, el deseo de comunicar lo que me duele y me inspira”, señaló.

Respeto

Asimismo, afirmó que su filosofía de vida está basada en el respeto por todo lo que la rodea. “Si no respetamos lo que tenemos, nunca aprenderemos a amarlo. En mis obras hay un deseo de cuidar con delicadeza a las personas, los animales y la biodiversidad”, expresó. Ese principio ético se refleja en su manera de concebir el arte como un puente entre la sensibilidad humana y la conciencia ambiental.

Olga Lucía Hurtado, ingeniera química y artista manizaleña.

Reflexión

Para el Centro Colombo Americano, la exposición El caos sensible representa una apuesta por destacar voces locales comprometidas con el territorio y la educación ambiental. Además, invitan a los visitantes a detenerse, observar y reflexionar sobre el equilibrio entre desarrollo y sostenibilidad.

El caos sensible estará abierta al público durante todo el mes de octubre, hasta el 12 de noviembre, en la Galería del Centro Colombo Americano de Manizales, con entrada gratuita. La programación incluye visitas guiadas y un conversatorio con la artista, donde se abordará el papel del arte como agente de transformación social.

Horarios: 

Lunes a viernes de 8:00 a.m. a 12:00 p.m. y de 2:00 p.m. a 6:00 p.m.

Sábados de 8:00 a.m. a 3:00 p.m.

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