Arranca el conteo regresivo para las actuales administraciones públicas, a las que les quedan 11 días a partir de hoy para que entre en vigencia la Ley 996 del 2005 o de Garantías Electorales que impone restricciones a gobernadores, alcaldes, secretarios de despacho, gerentes y directores de entidades descentralizadas con el fin de brindar garantías a quienes se inscriban como candidatos para las elecciones del 29 de octubre de este año. Por norma, dicha Ley tiene que empezar a regir cuatro meses antes de los comicios, es decir desde el 29 de este mes. Los ojos tendrán que estar más abiertos por estos días y las veedurías ciudadanas mucho más atentas a denunciar cualquier disparo de contratitis en las administraciones.
Durante este tiempo queda restringido en gobernaciones y alcaldías celebrar convenios interadministrativos, inaugurar obras públicas, modificar la nómina excepto las ocasionadas por faltas definitivas en casos de muerte o renuncia irrevocable, autorizar la utilización de inmuebles o bienes muebles públicos para actividades de candidatos, facilitar el alojamiento o el transporte de candidatos o de miembros de campañas, destinar recursos para actividades proselitistas y participar en ellas. Solo se les permite celebrar contratos bajo las figuras de licitación pública, selección abreviada y concurso de méritos que exigen tiempos prolongados para tramitarlos. Por eso se dice que lo que no contraten los mandatarios antes de esta fecha ya no alcanzarán a ejecutarlo.
Después de las elecciones de octubre les quedan a las administraciones solo dos meses del periodo, que se usan es para hacer informes finales y el empalme con quienes salgan electos. También el 29 de junio próximo comienza la inscripción de candidatos a Gobernación y alcaldías, y de listas con sus candidatos a Asamblea, concejos y Juntas Administradoras Locales. El abanico actual de precandidatos es grande, muchos quieren llegar y aspiran incluso sin tener formación ni experiencia suficientes para poner sus nombres a consideración del electorado. El panorama se va a complicar este año si cada uno de los 34 partidos y movimientos políticos que en Colombia tienen personería jurídica otorgan avales a candidatos propios y presentan sus listas a corporaciones públicas.
Ahora más que nunca y con una segura atomización política que se dará en el país, los ciudadanos deben votar de manera informada, consultar el material electoral que pongan a disposición instituciones y medios de comunicación serios como LA PATRIA, que rastrearemos los antecedentes y presentaremos hojas de vida y propuestas de los candidatos más opcionados. Solo así la ciudad y el departamento evitarán elegir y llevar al poder a quienes no tienen las condiciones para el cargo y por estos meses lo que van a hacer es anunciar promesas imposibles de cumplir. La ciudadanía debe blindarse de estos males de la politiquería, y solo lo puede hacer por medio del conocimiento.
Pareciera haber cansancio y hastío frente a todo lo que representa la política, desconfianza generalizada porque muchos de los elegidos por voto popular en las urnas hace cuatro años fueron inferiores a lo que dijeron hacer cuando estuvieron en campaña. Este es un momento clave el que va a comenzar si queremos que el desarrollo y la prosperidad acompañen a ciudades y departamentos. Entendible que ya no se les crea a los politiqueros, pero entre todos los candidatos con seguridad habrá hombres y mujeres calificados para llevar las riendas en los próximos cuatro años.
