Error al citar el director del Departamento de Música
Señor director:

El día de hoy ha sido publicada la noticia bajo titular Nueva versión del Himno de Manizales, entre gustos y disgustos, cuya autora es la señora Liset Espinoza, donde se enuncian comentarios del señor Yovanny Betancur como director del Departamento de Música, funcionario que ya no funge como tal desde hace más de un año, dado que el director del Departamento de Música es actualmente el señor Carlos Eduardo López Giraldo, nombrado en dicho cargo mediante la Resolución de Rectoría número 01112 del año 2022, por lo cual, se está dando a conocer al público en general una opinión particular que no corresponde a la realidad administrativa de la Universidad de Caldas. Ver acto administrativo: http://sig.ucaldas.edu.co/admiarchigestion/1000-1745.PDF
Por lo anterior, comedidamente solicito a la dirección del periódico, rectificar la presente noticia que ha sido publicada en el siguiente link: https://www.lapatria.com/manizales/nueva-version-del-himno-de-manizales-entre-gustos-y-disgustos.
Amablemente,
Paula Marcela Castaño Castaño, profesora asociada de la Facultad de Artes y Humanidades, Departamento de Música de la Universidad de Caldas.
Nota de la redacción
Gracias por escribirnos. Ofrecemos disculpas a nuestros lectores y a la Universidad por el error cometido. En nuestra base de datos figuraba Yovanny Betancurt con el cargo mencionado, la actualizaremos; además quedó corregido el dato en la nota publicada en nuestra página web www.lapatria.com

¡Claro que sí!, pero...

Señor director:

Sin la menor duda, el secuestro es uno de los crímenes más abominables que pueden cometerse en una sociedad humana. Cualesquiera sean las razones con que se pretenda justificar lo que jamás, en ninguna parte, será justificable. Cuando se trata de hacer de la víctima una mercancía, por el secuestro extorsivo, se está atentando en la forma más vil y execrable contra la dignidad del ser humano, al que se convierte en objeto de repugnante y criminal compraventa; los perpetradores de un secuestro se muestran como los más abyectos y desalmados enemigos de la sociedad.

La Iglesia católica, guardiana y defensora como nadie de la dignidad de ser humano, condena en términos perentorios el crimen del secuestro. Vayan, como muestra, estas citas. “El derecho a ejercicio de la libertad es una exigencia inseparable de la dignidad de la persona humana” (Catecismo de la Iglesia, 1738) “Los secuestros y la toma de rehenes hacen que impere el terror, y mediante la amenaza ejercen intolerables presiones sobre las víctimas” (ib., 2297) “…atentados a la integridad física, asesinatos, torturas…secuestros, demuestran un irrespeto total por la dignidad de la persona humana” (CELAM Documento de Puebla, N° 1262). Y no se necesita ser creyente para reconocer la perversidad del secuestro; basta tener un mínimo de sentido humano para afirmar que los secuestradores son peores que los animales.

Durante las últimas semanas el país se mostró sobrecogido de rabia ante el vil secuestro, perpetrado por los alevosos integrantes del llamado Eln, del papá de nuestro querido y admirado Lucho Díaz. El grito de protesta de toda la sociedad fue unánime, y la reacción de las autoridades, que pusieron en marcha un operativo gigantesco para tratar de rescatar al secuestrado, fue enérgico y plausible. Claro que sí, así tenía que ser, y el resultado de toda esa campaña a todos los ha alegrado, pero… Sí, hay un gran pero. ¿Y los demás secuestrados? Sabemos que son numerosos; la prensa ha consignado datos escalofriantes: de enero a septiembre de este año, ¡hay constancia de 241 secuestros! En lo que va corrido desde el día nefasto en que tomó posesión el que nos malgobierna, el crimen del secuestro ha crecido en un aterrador 77%! 

Los datos que aporta la Defensoría del Pueblo asientan que en lo corrido del 2023, el Eln ha secuestrado al menos 79 personas. Pero se trata de ciudadanos innominados, sin notoriedad en los círculos sociales, sin vínculos con personajes de la política o con estrellas del deporte. Y por esos secuestrados, ni se levanta un grito clamoroso de protesta general, ni el gobierno despliega una operación como la que acabamos de ver y aplaudir. Y, no puedo evitarlo, a mí me escuecen y atenazan varias preguntas: ¿es que hay vidas que valen más que otras?

¿Es que hay unos crímenes que al gobierno le interesa enfrentar, porque le reportan beneficios políticos, pero hay otros que poco o nada le importan? ¿Se justifica que el malhadado régimen actual mantenga dizque “mesas de diálogo” con los facinerosos, sin establecer, como condición mínima, que liberen a todos los que tienen bajo la ignominia del secuestro y se comprometan a nunca más incurrir en tal infamia? Es verdaderamente repugnante que un gobierno admita que un avieso representante y vocero de ese grupo de forajidos, el señor Antonio García, afirme que el secuestro es una irrenunciable manera de financiar sus actividades; una autoridad con la más mínima dosis de sentido y dignidad, daría orden inmediata de meter en prisión a quien eso se atreve a decir. Pero, algo increíble: el ministro de gobierno se despacha con una afirmación realmente imbécil y que constituye una auténtica barbaridad, por donde se la mire: que sí, que si se les pide que dejen de secuestrar, hay que pensar de qué van a vivir esos pobrecitos…¡Imposible una patochada más grande! ¿No sabe acaso el señor Velasco que ese y otros grupos de maleantes son los riquísimos empresarios del emporio de la droga?

¡Qué dolor! Es que, desde el momento en que en nuestra patria se admitió que con el crimen se puede negociar, que el sometimiento a la ley puede ser objeto de transacciones entre la autoridad y los delincuentes; desde que comenzó a parecerles a muchos admisible que los responsables de miles de secuestros y de otros crímenes execrables, en virtud de la felonía del peor traidor que ha tenido Colombia, -el de la palomita blanca en la solapa y el prostituido premio Nobel en su currículo-, estén, orondos, ocupando impúdicamente curules de legisladores, en vez de hallarse, como deberían, pagando sus delitos en la cárcel; ¡perdimos el rumbo! La deontología en el desempeño de las tareas de gobierno no asoma por parte alguna. Y en el horizonte de Colombia, bajo el ominoso desgobierno actual, se cuajan nubarrones cada vez más oscuros. Que Dios, el Dios de Colombia, cuyas leyes pretenden pisotear, nos proteja. 

Mario García Isaza

“Nuestro próximo alcalde de Manizales”

Señor director:

Ese es el título de un escrito publicado el 25 de octubre. Está al día, porque ahora se oye en los noticieros: “nuestra Policía Nacional”, “nuestro presidente de la República”, etc. Formas correctas y sencillas: nuestro próximo alcalde, el próximo alcalde de Manizales. La redundancia se oye mal. No compliquemos lo simple, simplifiquemos lo complicado.

Atentamente,

Lector/Oidor

“Caninos”

Señor director: 

Por La W Radio el ministro del Interior dijo el 25 de octubre que las autoridades utilizarán caninos para detectar a quienes compran votos. Comandantes de la policía vienen utilizando la palabra desde hace meses. Parece que les da vergüenza decir “perros”, o se plegaron al lenguaje de moda. Si no se refieren a perros sino a caninos, ¿quiere decir que también se usan lobos?

Atentamente,

Oidor

Primer ministro

Señor director:

Las cargas que soporta un presidente de la República son demasiadas y demasiado pesadas. Lo estamos padeciendo con el doctor Gustavo Petro, que se mantiene en reuniones internacionales gestionando lo del país y lo planetario. Necesitamos un presidente que sea el jefe del Estado y atienda lo externo, y un primer ministro que gobierne, que gobierne en lo interno. Y digo esto porque los ministros, o no alcanzan, o no dan pie con bola.

Atentamente,

Ciudadano

De las especializaciones médicas

Señor director: 

Es verdad que hay muchas exigencias y no es tan fácil, como no debe serlo por ser algo tan importante, tan influyente y tan impactante en aspectos tan sensibles, como lo son la vida y la salud de las personas. Las especializaciones médicas, enfocadas con criterios de responsabilidad y con rigor científico no pueden “ tirarse a la jura” como baratijas o bagatelas como ocurre con otras especializaciones “que producen risa” por su pobreza y el bajo nivel de exigencia, sin que tengan que entregarse a fondo para obtener un cartón que así los acredite. Ese nivel de exigencia y de rigurosidad les han conferido a algunas Universidades (con mayúscula) respetabilidad y reconocimientos en el contexto educativo por su grado de competencia y desempeño de sus egresados. Qué tal que los criterios de ingreso a especializaciones médicas fueran y llegaren a ser bien laxos para los aspirantes, ¿dónde quedaríamos los usuarios o pacientes, como los llaman, sabiéndose que son ellos quienes tienen los conocimientos para aliviarnos? Desde luego que también hay universidades (con minúscula) que llaman de garaje que titulan y titulan sin valorar la calidad de sus egresados, importándoles solamente lo económico, y son muchos “especialistas” orgullosos desempeñando su trabajo con mediocridad y falta de profesionalismo perjudicando a los PACIENTES, por pacientes, y más que por pacientes, por falta de recursos para acudir a clìnicas y hospitales que verdaderamente tengan profesionales ética y científicamente bien formados y refrendados por una verdadera vocación de servicio. Hay que recordar que los cartones no hacen milagros, ni devuelven la salud, ni evitan la muerte, pero unos buenos recursos a tiempo y bien aplicados seguramente evitarían deterioro de enfermedades y hasta muertes. Conozco médicos generales muy acertados, se aprecia con facilidad su mística, su vocación y su pasión por lo que hacen y les duelen sus pacientes, también especialistas. En medicina, vale la entrega, la dedicación y el buen pago, porque ser un buen médico, no es fácil. Que hay muchas trampas y trapisondas para ingresar a una especialización, es cierto, estamos en Colombia y aquí todo se permite, el cáncer de la corrupción está en todo el cuerpo del Estado y es tan generalizado que “todo se vale”.

Reconocimiento para los médicos generales y especialistas que saben su profesión y la ejercen con altruismo y respeto en bien de quienes recurrimos a ellos en momentos de angustia para recuperar nuestra salud. Que sigan las Universidades con sus Facultades de Medicina, tengan en cuenta que con la salud no se juega y que continúen siendo superexigentes en la formación de profesionales que merezcan ser titulados por su prestigio, el de los egresados y los usuarios que son la razón de ser de esta noble y altruista profesión. Pueda ser que este Gobierno, con su populismo demagógico,  no nos vaya a inundar de médicos extranjeros pensando más en ganar adeptos y sembrar adoctrinamiento e ideologías con algo tan sagrado como lo es la salud, como ocurre en otros países.

Médicos descontextualizados, porque las patologías de un país no son las mismas de otro y las enfermedades también son endémicas y algo va de Pedro a Pablo haciendo referencia a las Facultades de Medicina con niveles y exigencias diferentes. Un buen médico general, es prenda de garantía para un buen diagnóstico y para un buen acierto en la remisión a un Especialista oportunamente.

Cordialmente,

Elceario de J.Arias Aristizabal

Marcha por la paz

Señor director:

Le escribo con el objetivo de solicitar el apoyo de ustedes en la difusión de la Marcha por la Paz, que habrá de realizarse el domingo 3 de diciembre. Será una actividad en la que expresemos nuestro sentir en una marcha con banderas blancas y en silencio. Será un evento internacional destinado a promover la paz, la libre determinación de los pueblos y la armonía en todo el mundo. Creo firmemente que la paz es un valor universal que todos compartimos y que es fundamental para el bienestar de la humanidad. 

Al unirnos con este “grito silencioso”, esperamos llamar la atención sobre la resolución pacífica de conflictos, en un momento en que el mundo enfrenta numerosos desafíos. Apreciamos enormemente el papel de ustedes en la promoción por la paz y para lograrlo tener además la cooperación internacional. Su apoyo a nuestra Marcha por la Paz sería de gran importancia y contribuiría significativamente a su éxito. Estoy seguro de que su respaldo ayudará a aumentar la visibilidad de nuestro evento y atraer la atención de un público más amplio.

Es lo único que como ciudadanos podemos hacer, “expresar el sentir” ante la situación que se nos presenta a nivel mundial, las soluciones quizás solo están en los canales diplomáticos y otra vez lo digo en este “grito silencioso” de toda la humanidad”.

Espero contar con su apoyo en la búsqueda de la paz y la unidad. Sin tomar partido, solo pretendemos con esta actividad expresar la urgente PAZ.
 

José Fernando Salazar Ospina

Teléfono: 310 389 09 47

“Tipos penales”

Señor director:

De un tiempo para acá los que intervienen en los medios de comunicación no hablan casi de “delitos” sino de “tipos penales”. ¿Cuál es el motivo de este cambio de denominación?

Agradecimiento para los profesores de derecho y para los teóricos de la ciencia jurídica por la explicación.

Atentamente,

Ciudadano

Potencia mundial de  la vida, no es Colombia

Señor director:

La inseguridad sí es un “virus” para la vida de  sus habitantes, nacionales y extranjeros.

Con base en el informe periodístico “Elecciones: 436 hechos de violencia contra líderes políticos” publicado recientemente en el periódico LA PATRIA y otros medios de comunicación, sencilla y claramente se comprueba que Colombia, desde cualquier punto de vista que se vea,  no es, en el  presente tiempo, una potencia mundial de la vida.

La frase  que escuchamos, a manera de marca de la actual administración, no es el fiel reflejo de la situación general de ésta nación;   Colombia con desplazamientos, violaciones del cese al fuego y entregando subsidios a delincuentes, no puede ser la tal potencia mundial de la vida.

Tampoco es válida la frase institucional del Gobierno de Gustavo Petro por el número de masacres que ya superaron el centenar; además, son mucho más de 200 líderes asesinados.

A Colombia no se le puede calificar como potencia mundial de la vida con los incrementos en la inseguridad ciudadana y en las carreteras; secuestros, extorsiones, trata de personas, hurto a residencias y vehículos.

Colombia tiene ahora, en crecimiento, los más delicados  y  graves índices de inseguridad y ese sí es un virus para la vida de todos sus habitantes, nacionales y extranjeros.

Tampoco Colombia, el país que gobierna Gustavo Petro,   es potencia mundial de la vida mientras sus índices de desigualdades económicas y sociales sean tan altos y que mueran niños por carencia de alimentos en las regiones del Choco, Guajira y en otras partes del país.

Jorge Giraldo Acevedo

Que los sostengan ellos

Señor director:

Es el colmo que el Gobierno quiera financiar al Eln; pues que ponga un balde en el Congreso y en la casa de Nariño y recoja buena plata. Ganan para mercados de 100 millones y 40 cada mes por destruir el país y subirnos todo. Con ellos es inútil hablar, pero como estamos en la época en la que los asesinos, secuestradores, vándalos, la primera línea, etc. quedan libres, que los sostengan ellos.

Laura Franco

 

Manizales ciudad paisaje
Señor director: 

Vadeando ríos, franqueando bosques, escalando cerros, desafiando abi mos, soportando páramos, un grupo de mujeres y de hombres, de coraje sin par y valentía, van persiguiendo sin cesar sus sueños, mientras siembran semillas de osadía y plantan pueblos bellos en cada serranía.
Haremos una pausa en el camino, se decían, cuando la tarde se apague lentamente y la noche nos haga compañía.
Recorren sin descanso los senderos de quimbayas, ansermas y zopías, de pícaras, páucuras, carrapas y de armas, mientras late su corazón con energía y esperan la mañana venidera, para emprender la nueva travesía.
De repente en las cumbres de los Andes encuentran un milagro de luz, de ensueño y poesía:
Un balcón para otear paisajes, para vivir un nuevo atardecer en cada día, para sentir que el corazón allí descansa, para cantarle un bambuco desde el alma, a la luna verde azul que allí dormía, para dejarse hipnotizar por un nevado que, de oro, rosa y plata, se vestía, mientras el sol se apaga suavemente y se inclina sobre el Ruiz con gallardía para besar y darle un “buenas noches” a la luna que en las noches la nieve platearía.
Algunos se quedaron para siempre, embrujados por ese mágico lugar de fantasía, de horizontes sin fin y brisas suaves, tierra de hadas, quimeras y utopías, fundando entonces la ciudad paisaje, la de olor a café y a orquídeas lila, la de una raza noble y corazón valiente, que lleva en sus venas alegría, que abre sus puertas sin par a quienes llegan y les brinda calor y bienvenida.
Manizales, la ciudad paisaje, la de olor a café y a orquídeas lila.
Mario Gallegos Hencker


¿Por qué no existe un día en el santoral católico para la santa Laura Montoya?
Señor director: 

La única santa colombiana católica, Laura Montoya Upegui, aún no tiene un día festivo en el santoral. Jericó mayo 26 1874; Medellín octubre 21 1949. Fue una monja docente antioqueña al servicio de la evangelización de los indígenas, beatificada por Juan Pablo II y canonizada por el papa Francisco el 12 de mayo del 2013. La razón: milagro obtenido al médico anestesiólogo Carlos Eduardo Restrepo Garcés, curado de poliomielitis enfermedad que padecía desde los 12 años. Así, como cada 1 de noviembre se conmemora el Día de Todos los Santos -por cierto importados- la iglesia colombiana debería adjudicar un día a la santa Laura, como homenaje a una misionera perseguida no solo por los civiles de su época sino también por los mismos religiosos.
Helena Manrique Romero

Recordando a Nicolás
Señor director:

Viernes, noviembre 3/23. Me levanté pensando en la misa de 2:00 p.m. en la Catedral; en portería reclamé “La Patria”, un titular me dio el de esta crónica nostálgica. Nicolás fue mi alumno de religión cuando tenía 13, 14, 15, 16 años. Le enseñé aspectos de la Biblia, Iglesia, sacramentos, doctrina social eclesial, espiritualidad ignaciana, proyecto de vida. En mi mente lo veo sentado en un pupitre en la parte de atrás contra la pared, respetuoso y en silencio. De seguro tuvimos las normales relaciones de exigencia y rebeldía, propias del maestro-alumno. 
Recuerdo un hecho con un alumno familiar de Nicolás, en el que intervino su familia. Perdió religión en 2.8 y con otras 2 el año. Me di cuenta. Le propuse al director académico jesuita subir esa nota a 3, pues no veía justo así repetir el año. No lo permitió. Hablaron con el rector y él les dijo que había perdido una materia importante del pénsum. Quedé aburrido. Pasaron los años. Como director académico del colegio, en el 2000, hablé con Nicolás para editar en “La Patria” el anuario Gonzaga. Así fue. Lo compruebo en 2001- 2005. En el del 2001 hay una valiosa foto en la que aparecen el presidente de Colombia Andrés Pastrana; Isabel Mejía de Vélez, la Caldense del Año y su hija Mariana, estudiante Gonzaga, y Nicolás Restrepo. Y qué frase: “primero tenemos que graduarnos como seres humanos”. El anuario 2004 fue muy especial por los 50 años del colegio. Nicolás recibió la Cruz Gonzaga de Oro junto con el gobernador, alcalde, provincial, presidente de Aso Gonzaga, vicario diocesano. Ese año me entrevisté con Nicolás con el fin de publicar en “La Patria” un listado de exalumnos Gonzaga con desempeño excelente. Hablamos de uno en especial que presentaba un modo de ser no convencional. Estuvimos de acuerdo en no hacer ningún tipo de discriminación y respetar a cada quien en su valor humano.
En 2017, un columnista escribió sobre la visita del Papa a Colombia y lo hizo en forma despectiva. No aguanté. Le respondí. Y para ello hablé con Nicolás, quien me dijo: “Bien pueda me envía el escrito. Y escriba que aquí le publico”. Llevo unos 180 artículos. Y conté mis correos con Nicolás por esta razón: unos 145. En 2021 compartimos en el colegio y en termales El Otoño la celebración 40 años, promoción Gonzaga 1981. Al iniciar la misa, Nicolás pasó por mi lado, me dio la mano y dijo: hoy sale su escrito. En 2022, el colegio me pidió el favor de contactar a Nicolás para el evento artístico de “Conectarte” y ahí supe la noticia.
En mayo 28 le escribí a Nicolás: “He sentido deseos de llamarte para desearte la mejor energía interior que te lleve a afrontar y salir avante en tu actual situación, si es cierta la que me llegó sin querer. Creo que cada quien cuenta con esa fuerza interior que podemos actualizar cuando hay dificultades en la vida. Soy practicante diario del “código de curación” que te recomiendo. Estoy seguro, sin despreciar la medicina, que esa energía interior ayuda mucho para salir adelante. Te deseo lo mejor y recuerda que la fe y la oración son medios muy importantes para salir bien. El artículo que te mando, escrito hace 20 días, coincide con este mensaje que te envío. No lo escribí por ti. “Para que a mí”. Me respondió: “Gracias Alirio. Entiendo tu mensaje. Me siento bien y tranquilo”. A los días, nos encontramos por San Rafael. Charlamos un poco. Me ratificó que se sentía seguro y tranquilo. Descansa en Paz.
Alirio De Los Ríos Flórez.

Comunicado a la opinión pública manzanareña
Señor director: 

Desde la Veeduría ciudadana Transparencia por Manzanares felicitamos al alcalde electo, Carlos Enrique Botero Álvarez,  auguramos éxito en su gestión y esperamos que llegue con un equipo nuevo a la Alcaldía y al Hospital, que oxigene el ejercicio de la administración pública en nuestro municipio y que les brinde oportunidades laborales a otros manzanareños que quieren contribuir al desarrollo de su pueblo con su experiencia, formación y profesión. Esta Administración que termina, concluye su periodo con un alto nivel de desaprobación, un alcalde cuestionado en su gestión y en el manejo de los recursos públicos del municipio, de igual manera funcionarios y contratistas cuestionados en sus actuaciones y comportamiento.
Que sea este el momento de enderezar el rumbo de Manzanares y tener a los mejores al frente de la Administración, las secretarías, las oficinas, los programas y proyectos que esta nueva Administración se proponga para los próximos 4 años. Al nuevo Concejo Municipal: asumir este reto representando los intereses y necesidades de los ciudadanos y no los intereses personales o partidistas, la corporación que concluye su periodo deja vacíos enormes en el control político y en el debate, en la vigilancia y cuidado de los recursos públicos y en la responsabilidad frente al estudio y análisis de los proyectos aprobados o negados, es hora de retomar con seriedad el control político, la vigilancia y la investigación.
Desde esta Veeduría seguimos insistiendo en la necesidad y pertinencia de transmitir en vivo las sesiones del honorable Concejo Municipal, pues siendo este un ente de representación ciudadana, la comunidad manzanareña y en general todas las personas tenemos el derecho de saber cuál es la representación que están ejerciendo nuestros concejales desde el debate, el control y la vigilancia y cuál es el nivel de discusión frente a los proyectos de acuerdo tramitados en esta entidad, asimismo las posibles denuncias que por presuntos hechos de corrupción o malos manejos se hagan desde el Concejo.
Les auguramos éxitos y los mejores deseos en sus funciones y en su representación.
Henry Alberto Giraldo

Columnista filósofo
Señor director:

Es el señor Luis Felipe Molina R. Todos sus escritos son profundos, de grande y alto contenido. En el que se publicó el 23 de octubre habla muy bien de la phrónesis, la prudencia aristotélica.
El maestro Aristóteles enseñó y escribió varios siglos antes de Cristo. Y en nuestra era, en el siglo XX, el pensador francés Jacques Maritain, católico, auditor en el Concilio Vaticano II, definió admirablemente la prudencia: “Reina de las virtudes morales, noble y hecha para mandar, pues dirige nuestros actos hacia un fin último que es Dios, soberanamente amado”.
Luis Felipe es joven: “si chiquito quiebra grano, ¡qué será cuando...!”
Don Cecilio