El Manizales Cafest cuenta con un espacio para que los visitantes escuchen música en vivo.

Fotos | LA PATRIA El Manizales Cafest cuenta con un espacio para que los visitantes escuchen música en vivo. 

La edición 66 de la Feria de Manizales llega a su séptimo día. La música en vivo se ha apoderado de las calles, y las personas salen a caminar en botas de cuero, sombrero y poncho.

Ayer, por ejemplo, el día estuvo soleado, y turistas y propios no dejaron pasar la oportunidad para salir a conocer los lugares representativos de la ciudad, como lo es la Basílica Menor de la Inmaculada Concepción -ubicada en el Parque de Caldas-, La Catedral o el Monumento a Los Colonizadores.

El reloj no marcaba las 12:00 del mediodía cuando los visitantes se disponían a caminar el centro de Manizales y a fotografiar fachadas y paisajes del lugar. Tal fue el caso de Doris Carbonero, quien proviene de Cali y manifestó que "ve a la ciudad muy bonita y a la gente muy organizada".

A las 2:00 p.m. el público empezó a llegar a la Plaza de Toros, en donde los esperaba la tercera corrida de esta temporada taurina. A los alrededores se posaron, músicos y vendedores de sillas, cojines, carpas, botas de licor y alimentos, con el fin de asegurar la mayor comodidad a los seguidores de la tauromaquia.

 

Opciones

Para los amantes de la gastronomía típica y las artesanías el mejor lugar es el Mercado Persa de Chipre. Carrieles, llaveros, mochilas y atrapasueños adornan los pasillos armados de forma provisional detrás de la Facultad de Artes de la Universidad de Caldas.

Este es un lugar para toda la familia, pues además de ofrecer productos para la belleza y el hogar, también cuenta con una gran variedad de empanadas, frutas, verduras, obleas, pizzas y demás.

El café tiene sede oficial en el sector de El Cable. Allí se encuentra Manizales Cafest, con cerca de 20 puestos, en donde los interesados consiguen bebidas y postres a base de café.

Para ambientar el lugar, los organizadores transportaron el paisaje cultural cafetero a la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional, pues a la instalación la adornan bultos de café, paja y un jeep.

Yuri García, originaria de Bogotá, cuenta: "Es la primera vez que venimos a Manizales a vivir la Feria, siento que las muestras del café han sido algo muy ordenado y la información ha corrido por todo el país, creo que la Alcaldía fue muy estratégica".

Jhoan Martínez también es de Bogotá. Él resalta el ambiente y la gastronomía de la ciudad. "Yo vi a turistas de muchas partes del mundo, vi argentinos, escoceses, españoles, suecos. Entonces yo dije: algo tiene la Feria que la visita tanta gente, y me animé a venir", concluye Jhoan.

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